Análisis Zombie Army 4: Dead War + Parche Next Gen.

Lo que empezó siendo un spin-off aislado de la veterana Sniper Elite (de hecho, en un primer momento Zombie Army iba a ser un Dlc del Sniper Elite V2) ha terminado consolidándose como otra saga que sin lugar a dudas está muy cuidada y mimada por Rebellion. La cantidad ingente de contenido adicional (de pago eso sí) que el juego ha recibido en el último año, los desafíos semanales o la actualización para la next gen denota el interés de la compañía por cuidar al usuario de Zombie Army 4; Dead War, claramente enfocado al multijugador y asentando una gran base que cada vez se hace más popular.

Zombie Army 4: Dead War es un shooter en tercera persona en el que podremos elegir a uno de entre cuatro francotiradores con el que pasarnos la campaña o batallar en el online. La misión principal será la de siempre; terminar con todas las hordas de zombies nazis que asolan Europa. Al menos, esa es la premisa del modo historia, donde durante ocho capítulos divididos en 4 fases deberemos eliminar a las tropas de los nazis que ha resucitado Hitler y que han asaltado Europa. Viajaremos por varias ciudades de Italia (solo un capítulo será en Croacia) y las situaciones serán de lo más estrafalarias, desde tiburones blancos que nadan por los canales de Venecia hasta un zoo infestado de zombies. Los escenarios son cerrados y muy lineales, pero esta vez han sido dotados de mayor dinamismo añadiendo objetivos intermedios del estilo de reparar diferentes cajas de fusibles o coger determinadas piezas del escenario antes de poder avanzar. 

El elenco de armas es variado, tendremos pistolas, escopetas, ametralladoras, armas pesadas…aunque el juego siempre acaba invitando a utilizar el rifle de francotirador, más conocido aquí como fusil de precisión. Todas las armas se pueden mejorar conforme avanzan las secciones gracias a los Kits de mejoras que encontraremos en cada una de las 4 fases que conforman los capítulos. De esta forma, podremos aumentar el daño o la cadencia de nuestra arma, así como personalizar el diseño y color de la misma. Las armas se sienten mucho mejor que en los juegos anteriores, y es un gustazo aniquilar todo enemigo que osa plantarnos cara, especialmente cuando hace aparición la mítica Kill Cam con la que veremos todo tipo de eliminaciones gores en las que resquebrajamos huesos o atravesamos ojos, cerebros…y ¡hasta testículos! A todo esto hay que añadirle el arsenal de granadas y minas que llevamos equipados, el ataque especial cuerpo a cuerpo que se carga conforme avanza el tiempo o el disparo especial de cada arma que al igual que el anterior también se carga con el paso del tiempo. Por si fuera poco, al realizar varias muertes seguidas obtenemos la capacidad para realizar una eliminación automática que nos otorga algo de vida. Esto, sumado al único botiquín con el que podemos cargar, le imprime un componente estratégico muy interesante al combate en las zonas más difíciles de superar. Trampas, bombonas de butano…todo vale para extinguir las hordas de Hitler.

Además de los mencionados kits, cada capítulo tendrá diferentes documentos coleccionables que añadirán ligera información a la trama, sin llegar eso sí a ser apenas relevantes más allá del pique de encontrarlos todos. 

La campaña puede llevarnos entre 10 y 15 horas completarla en función de la dificultad elegida y de lo coleccionistas que seamos. A pesar de lo repetitiva que pueda parecer la propuesta de eliminar zombies constantemente en los diferentes escenarios, los tiempos de cada fase están muy bien medidos para no sentir pesadez en ningún momento. Por si fuera poco, la duración se dispara cuando nos adentramos en el adictivo mundo de las hordas donde podremos unirnos en sesiones con hasta 3 amigos. Es aquí donde en las dificultades más altas el juego se torna brillante e imposible de abandonar hasta que los cuatro jugadores han fallecido. La coordinación y estrategia será fundamental en el cooperativo. Se pueden crear salas para jugar hasta 4 jugadores tanto en cada fase del modo historia como en el modo horda.

Aprovechando que el juego ha hecho su aparición en el PS Plus del mes de Abril, (también se encuentra en el Gamepass de Microsoft) Rebellion ha sacado un parche totalmente gratuito con diversas mejoras para la nueva generación, tanto de Play Station 5 como de Xbox Series X.  Zombie Army 4 no destaca precisamente por su músculo gráfico, y en ese sentido el parche no va a paliar algunos problemas de resolución o distancia de dibujado pero sí que mantiene la buena ambientación lograda en cada escenario. 

La versión de PS5 alcanza una resolución dinámica a 4K y una tasa de 60 FPS, mientras que Xbox Series X nos permite elegir entre dos modos (el modo resolución ofrece 4K dinámicos y 60 FPS, y el modo rendimiento reduce la resolución a 1080p pero alcanza los 120 FPS). 

Otra novedad fundamental es la de la reducción de los tiempos de cargas. Es una maravilla iniciar la consola y estar aniquilando zombies en cuestión de segundos. 

Igualmente, se han mejorado diversos problemas del juego como no poder interactuar con algunos elementos del entorno. 

Por último, el Dual Sense de Play Station 5 ha tenido una mínima actualización, pudiendo ahora escuchar por el altavoz diferentes sonidos. Por ejemplo, cuando pausamos el juego, se escuchan voces y ecos animándonos a continuar jugando. No se han implementado mejoras para los gatillos adaptativos o la vibración háptica, una pena porque le sentaría genial al gunplay. 

Zombie Army 4: Dead War es un juego con las cosas muy claras y respetando su seña de identidad. No busca una gran historia, unos gráficos de infarto o un gameplay revolucionario, lo único que busca es lubricar un videojuego divertido a rabiar y con mucho contenido para estar enganchado largo tiempo. Aprovechando que está tanto en Gamepass como en PS Plus (si lo descargaste en Abril) merece que le deis una oportunidad que se han ganado a pulso. No es una revolución sino un pulido de una fórmula que funcionaba y que ahora han llevado un paso más allá.