Análisis de Horizon Call of the Mountain.

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Pistoletazo de salida para Psvr 2:

Sony siempre tuvo claro que necesitaba contar con un estudio de plena confianza para el pistoletazo de salida de PSVR 2. Ahí fue donde entró en juego Guerrilla Games, que en colaboración con Firesprite se pusieron manos a la obra para contarnos una nueva historia que aprovechase ese mundo post-apocalíptico en el que las máquinas gobernaban el mundo que tanto nos había fascinado. Tanto ha sido la confianza depositada por Sony en este proyecto, que Horizon Call of the Mountain ha sido el único juego que ha sido incluido en un pack de Psvr 2, y es que literalmente, se ha convertido en el protagonista de todo el Marketing del nuevo visor.

Mucho más que una demo técnica:

La tarea más difícil para Guerrilla era conseguir un equilibrio perfecto entre lo que sería una demo técnica que enseñara las bondades de la nueva tecnología y un videojuego al uso, y reconozco que la sensación que he tenido ha sido la de encontrarme exactamente en ese punto intermedio. Esto, lejos de lo que crean muchas personas, no es una simple demo técnica. Los primeros compases de la aventura nos enseñan las múltiples posibilidades que tenemos, a nivel del funcionamiento de los controladores, del eye tracking, poderío gráfico o técnico, pero conforme pasa la primera hora entramos en una dinámica de avance sin retorno. No es un Horizon como los que conocemos, y es que la sensación que he tenido durante todo el viaje ha sido más de estar ante un Uncharted de corte pasillero que de un Horizon de mundo abierto. Como si hubiésemos embotellado la saga de Aloy para exprimirle el jugo en 10 horas en vez de en 60. Y funciona. Realmente funciona, con ritmo, regularidad y sentido en todo su conjunto.

Captura de Horizon de Call of the mountain
Una aventura directa y plana:

Para esta aventura no contamos con la buena de Aloy. Le sustituye como protagonista, Ryas, un antiguo Carja Sombrío experimentado en la escalada con la necesidad de redimir los errores que cometió en el pasado. Cautivo, la propuesta que nos harán será la de subir hasta la cima de la montaña para rescatar a otro experimentado escalador llamado Urid, que no es otro más que nuestro hermano. Pronto, habrá un tercer escalador experimentado, nosotros mismos. Y es que el juego bien podría haberse llamado Horizon la escalada de la montaña, pues gran parte del juego lo vamos a pasar trepando y escalando en ese infinito ascenso hasta la cima. Puede ser que esta propuesta no convenza a todos los jugadores, de hecho, nuestros brazos van a sentirse cansados en muchas ocasiones, pero también es verdad que será gratificante hacer las correspondientes paradas entre ascenso y ascenso para reponer fuerzas, otear el paisaje y experimentar con el entorno. A mí no se me ha hecho pesado.

Las máquinas seguirán teniendo relevancia:

Por supuesto, las máquinas van a tener un peso importante en la aventura. Los combates contra ellas van a tener una curva de complejidad y dificultad marcada, pero sobre todo una ‘ epicidad ‘ in crescendo que ya en su fase final nos dará auténticos espectáculos de combates. La mecánica es idéntica a los juegos en plano, buscar los puntos débiles de las máquinas y encontrar los elementos a los que son vulnerables. Eso sí, cada pelea se va a sentir ligeramente limitada al no tener movimiento libre, todo se sucede en una especie de arena en la que nos movemos a golpe de ‘dash’ alrededor de ella.

Accesibilidad para todos los públicos:

Antes de empezar la historia vamos a tener un amplio abanico de opciones de configuración para elegir la manera que mejor se adapte a nuestro estilo de juego. Sony y sus estudios llevan años trabajando en dar accesibilidad a todos los públicos y aquí puede llevarnos tranquilamente diez minutos de reloj dejar resuelta la manera en la que jugaremos. Ya sea sentado o de pie, con seguimiento ocular, giro libre, movimiento con stick o dando brazadas para caminar, efecto buzo para rebajar los mareos o verlo a pantalla completa…el repertorio es enorme y todo funciona realmente bien, así que mi consejo es valorar tranquilamente antes de empezar lo que mejor se adapte a nuestras necesidades. En mi caso opté por jugar sentado y con todas las opciones que podrían dar mareos activadas, giro rápido, movimiento libre, sin viñeteado (efecto buzo) etc. pero si sois novatos y sentís incomodidad, podéis suavizar y rebajar la experiencia.

Escalada, combate…y exploración:

Y entonces comienza la aventura de Ryas. Una historia plana y básica donde todo girará en la búsqueda de Urid. Además de la ya mencionada escalada, el otro protagonista será nuestro inventario o equipo liderados por el arco, con el cual podremos principalmente defendernos de los peligros que nos acechan. Durante cada fase, tendremos el aliciente de encontrar y acertar con el arco las diferentes dianas que hay en el escenario escondidas. Esto, que en un juego en plano sería un coleccionable absurdo, es aquí una de las cosas que más vitales me han parecido durante toda la aventura, especialmente porque nos va a dar tregua entre la escalada y porque va a servir para disfrutar de cada recoveco. En Vr, detenernos y contemplar a nuestro alrededor es simplemente una maravilla. Otra de las opciones ajenas a la trama que tendremos durante la aventura y que alargarán la duración serán los hitos, unas pruebas donde apilar varias rocas intentando conseguir la mayor altura posible. Igualmente, habrá situaciones de exploración con el entorno y con los objetos.

Más inventario que el Inspector Gadget:

El equipo no solo se va a limitar al arco. Poco a poco iremos descubriendo nuevos artilugios como el piolet, el boomerang o el pincho con el cual unir dos puntos que nos permitan con la cuerda desplazarnos de un punto a otro. Es muy intuitivo abrir el inventario en forma de radial y elegir el gadget que necesitemos en cada momento, aunque un cinturón a lo Star Wars Vr no vendría mal.

Rozando el techo técnico de la Vr:

Tecnológicamente el juego es descomunal. Una de las cosas más llamativas es el tracking, que si bien falla en ocasiones al coger objetos (estos tiemblan o nuestras manos se entrecruzan de manera antinatural) en general tiene una gran capacidad para detectar nuestras manos incluso cuando estas estén a nuestra espalda.

La escalada es sencilla e intuitiva, nada se puede reprochar al respecto. Recomiendo tener espacio alrededor o nos golpearemos sin querer, ya que avanzar por los puntos de agarre va a implicar estirar los brazos como si de la vida real se tratara.

Posiblemente estemos ante uno de los juegos con mayor músculo gráfico no ya solo de Psvr 2 sino de la industria. El magistral uso del HDR impregna cada paisaje de un colorido sin igual. La fauna, vegetación, cielos, iluminación…roza la locura. Hubo un momento durante una zona de escalada en la que podía ver una hilera de hormigas rojas avanzando. Parecía completamente real.

El destello del sol nos cegará literalmente, se pueden ver los poros de las escarpadas paredes de las montañas y comernos una manzana parecerá eso, que estamos comiéndonos una manzana de verdad.

Una duración más que correcta:

La duración dependerá de lo asombrados que nos deje el paisaje y el tiempo que queramos dedicar a los hitos y dianas, pero difícilmente se va a ir a más de 10 horas, las cuales me parecen de sobra en un triple A de esta magnitud y donde hay más momentos de calidad que de relleno. Una vez finalizado el juego, podremos elegir el capítulo que queramos y terminar de recoger o explorar lo que nos haya quedado pendiente. Hay un modo llamado safari para mostrar a las visitas las bondades del juego; es como una secuencia de varios minutos donde vemos pasar diferentes máquinas a nuestro lado. Y por último queda una especie de arena de desafíos de disparo con el arco y carrera de escalada con las que picarnos y alargar la experiencia.

Horizon COTM o la excusa perfecta para comprar Psvr 2:

Horizon Call of the Mountain es esa carta de presentación de Sony con la que nos muestran el camino a seguir. Visualmente espectacular e inmersivo, jugablemente divertido y con detalles y físicas sin parangón. Guerrilla ha dado a Sony un motivo para confiar en ellos y a nosotros otro para gastarnos nuestro dinero en adquirir esta joya de visor que nos muestra sus bondades con esta obra preciosa y divertida de inicio a fin.

Nota de Horizon de Call of the mountain
Carlos González Bravo

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