Análisis Super Crazy Rhythm Castle

PlayStation 5 alcanza los 50 millones de unidades vendidas
21/12/2023
Anunciados los juegos y contenidos que llegarán a Xbox Game Pass durante la primera mitad de enero
04/01/2024

Super Crazy Rhythm Castle es el nuevo juego desarrollado por el estudio británico Second Impact Games y uno de los numerosos proyectos que KONAMI tiene preparados por su parte como distribuidor de videojuegos. Esta aventura musical propone a los jugadores adentrarse en el alocado castillo del Rey Ferdinand y superar numerosos desafíos al ritmo de buena música, ya sea en cooperativo con otras personas o en solitario.

Quién os escribe sigue sin ser un jugador habitual de videojuegos cooperativos (algo que pensé que cambiaría tras disfrutar del maravilloso It Takes Two) y tampoco dispongo de gente cercana que suela estar disponible para echar unas partidas. Una cosa que me interesó muchísimo de este Super Crazy Rhythm Castle es que, en sus tráilers, hacía mucho hincapié en que su aventura se podía disfrutar en solitario sin ningún tipo de problema. Lo normal en algunos juegos cooperativos que, por lástima, también ofrecen la posibilidad de jugarlo sin otras personas es que la experiencia suele ser muy sosa, algo que me parece muy lógico. Pero este juego daba la sensación de que podía cumplir perfectamente lo que prometía en sus vídeos promocionales. Por lo tanto, yo en este análisis os voy a contar cómo fue mi experiencia adentrándome en el castillo del Rey Ferdinand sin compañía alguna.

El objetivo de la trama de Super Crazy Rhythm Castle es muy fácil: hay que derrocar a este rey loco y a su flamenco que hace de ayudante. Una cosa que se lleva intentando durante años y, que en esta ocasión, nos tocará a nosotros representando a cualquiera de los personajes que seleccionemos antes del comienzo de la aventura. ¿Y cómo hay que destronar a ese «malvado» rey? Pues superando unos desafíos cargados de ritmo y de una banda sonora muy buena (la cual tiene lista oficial en Spotify) donde destaca sobre todo el tener que tocar estas canciones a lo Guitar Hero.

Dependiendo de la dificultad (Normal y Pro) y de la habilidad que tengáis con las manos, habrá que seguir el ritmo de estas canciones mediante los 3 o 4 botones que harán de baterías, guitarras, bajos o cualquier instrumento musical. Pero ojo, que en estos niveles habrá que hacer algo más que simplemente disfrutar de lo bien que seguimos el ritmo de las canciones. Nuestra actuación se verá interrumpida muchísimas veces por culpa del dichoso rey o del entorno, convirtiendo esas situaciones en unos minijuegos absurdos pero divertidos que serán clave para conseguir tanto la mejor puntuación como el mayor número de estrellas al finalizar cada una de estas pantallas.

A través de sus 22-30 niveles (más adelante explicaré esto), el ingenio y la creatividad de Super Crazy Rhythm Castle brillará a través de cada uno de las situaciones que ofrece. Ojalá poder llenar este párrafo con todos los minijuegos que componen la aventura, porque hay de todo y gran parte de ellos ofrece una experiencia divertida, pero habrá que apañarse con unos pocos ejemplos: jugar a un videojuego de lucha donde los dos instrumentos de la canción servirán tanto para atacar como para curarse, robar un violín utilizando una serie de herramientas con batería limitada que destruirán obstáculos del escenario y que habrá que recargar tocando la canción, o realizar una especie escape room basado en el «Piedra, Papel o Tijera» que me pareció una barbaridad a nivel jugable. A eso se le suman las batallas contra una serie de jefes finales, a los cuales habrá que derrotar tras las clásicas tres rondas de toda la vida y que también derrochan mucha originalidad a la hora de enfrentarlos. Disparar a un DJ Berenjena al ritmo de música dubstep, tirar porciones de quesitos a unas manos demoniacas que son intolerantes a la lactosa o sabotear la actuación de un malvado pescado son algunas de las batallas que encontraréis durante el juego.

Unas fases que os aseguro que son muy divertidas, pero que también os harán sudar de lo lindo incluso (creo yo) en cooperativo, pues los niveles irán aumentando de dificultad más por la situación que ofrecen que por las canciones que hay que tocar. Consciente de ello, Super Crazy Rhythm Castle ofrece unas cuantas mecánicas más para que los jugadores se puedan enfrentar o esquivar tanto a los enemigos como a los obstáculos que aparecen en los niveles, ya sea un dash mediante una trompeta de alubias (sí), una gaita que puede eliminar a las malas hierbas o un violín-metralleta (sí de nuevo), entre otras posibilidades.

Aparte de los niveles de la aventura, Super Crazy Rhythm Castle también suele tener unos amplios escenarios que conforman el castillo del Rey Ferdinand y que suelen servir como nexo tanto para acceder a las diferentes fases como a otros modos de juego enfocados en el cooperativo. Estos también se suelen aprovechar para realizar unas pequeñas misiones principales donde tendremos que cumplir las peticiones de algunos de los NPCs que podremos encontrar por las habitaciones del castillo y que no distan mucho del buen rollo que ofrece Super Crazy Rhythm Castle. Son cosas muy rápidas de hacer y que amplían el lore tanto de la situación del castillo como de quién es realmente el Rey Ferdinand. Encontrar el perro perdido del gorila de una discoteca para que nos deje pasar al nivel, alimentar a un esbirro a base de las estrellas conseguidas en los niveles para acceder a un nuevo lugar o encontrar a un botón gruñón que permitirá quitar la barrera de acceso hacia la escalera del castillo son algunos ejemplos de esas pequeñas tareas.

Esto, más o menos, es todo lo que compone la campaña principal de este Super Crazy Rhythm Castle. Una aventura que ya os puedo confirmar que se disfruta muchísimo en solitario, aunque sí es cierto que la locura de ciertos niveles demuestra claramente que se disfrutarían mejor junto a otros jugadores. Pero, en general, el juego cumple lo que prometía. Si queréis disfrutar de Super Crazy Rhythm Castle en solitario lo podréis hacer perfectamente.

(ACTUALIZACIÓN 04/01/2024 13:15)

En el texto original de este análisis, el cual fue publicado el 3 de enero de 2024, destaqué como punto negativo el tener que recolectar 66 estrellas (obtener 3 estrellas en los 22 niveles del juego) para, según yo entendí en su momento, conseguir el final verdadero del juego, algo que jugando en solitario me parecía imposible. Gracias a la gente de Second Impact Games, los cuales contactaron conmigo vía X en relación a ese párrafo, revisé de nuevo los últimos niveles del juego. Hay que decir que la fase final del Super Crazy Rhythm Castle (al menos para mí) te deja un poco confuso, pues uno de los personajes clave de la trama te señala que «ya sabes lo que tienes que hacer» y en su momento yo no entendí muy bien los pasos a seguir. El caso es que sí, la campaña de Super Crazy Rhythm Castle se puede terminar en solitario sin problemas y con las estrellas que tengas en ese momento. ¿Y las 66 estrellas para qué son? Pues puede que tenga relación con completar al 100% el juego y que, una vez alimentado ese esbirro universal con las 66 estrellas, salga una divertidísima escena final. Mantengo que conseguir en solitario esas 66 estrellas es una tarea complicada, pero al menos podemos dejar claro que ese objetivo no tiene nada que ver con la finalización de la aventura principal. Dicho esto, ¡mil gracias Second Impact Games!

Dejando a un lado la estructura principal de Super Crazy Rhythm Castle, el juego ofrece dos modalidades diferentes donde poder disfrutar de las canciones sin la locura constante de la aventura o enfrentarnos a nuestros amigos en nuevos minijuegos. El primero de ellos es el Laboratorio Musical, un lugar que sirve también como viaje rápido entre los diferentes escenarios del castillo y que nos permitirá tocar todas las canciones del juego para conseguir numerosas recompensas. La precisión y el buen ritmo de las canciones se valorará mediante cuatro medallas diferentes, las cuales otorgarán unos puntos que nos servirán para ir desbloqueando varios de los coleccionables que se pueden encontrar a lo largo de este laboratorio. Nuevos personajes para usar durante la campaña e incluso nuevas canciones basadas en algunas de las míticas sagas de KONAMI (Castlevania, Gradius, Dance Dance Revolution…) serán algunas de esas recompensas que se podrán lograr a través de este relajado espacio. Por otra parte está el rincón de Enfrentamientos, el cual está enfocado principalmente en ofrecer nuevos minijuegos cooperativos. Lamentablemente, no se ha podido comprobar en profundidad para este análisis debido a esa experiencia en solitario que os he comentado en este texto.

Conclusión

Super Crazy Rhythm Castle ha tenido la mala suerte de estar entre los numerosos lanzamientos que tuvo ese alocado final del 2023, algo que me da la sensación de que ha pasado desapercibido para muchos jugadores. El nuevo juego de Second Impact Games y publicado por KONAMI me ha parecido una aventura super divertida y muy fresca que, como os he comentado, da igual cómo la juguéis. Solos o acompañados de otros jugadores, disfrutaréis muchísimo de los «malvados» desafíos del Rey Ferdinand y de sus esbirros. En términos generales, se podría considerar este Super Crazy Rhythm Castle como un juego bastante recomendable.

Santiago Sánchez
Santiago Sánchez
Gestor de contenidos y redactor en GamingUniverse. ¡Lo importante es disfrutar de los videojuegos!

Deja un comentario