Análisis «Kayak VR Mirage»

Hace la friolera de más de 4000 años ya se había inventado el Kayak, y digo friolera porque los primeros usos se dieron en el Ártico, siendo útil como medio de transporte para los esquimales en esa necesidad de realizar sus desplazamientos por las frías aguas.

Hemos tenido que esperar hasta el año 2022 para tener la oportunidad de vivir un acercamiento virtual a esa experiencia casi real, llegando hasta límites que pocos habrían sospechado alcanzar antaño. Y quiero dejar remarcado que Kayak es, por encima de un videojuego, una experiencia, con todo lo que ello implica, para bien y para mal.

Concebido originalmente para Pcvr y aprovechando su llegada, unos meses después de su estreno, a PSVR 2, os voy a contar qué es Kayak y si es realmente lo que estabas buscando. 

A lo largo de mi vida he tenido varias experiencias con variedades de piraguas de todo tipo, entre ellas el Kayak, y lo que más sorprende del juego es su fidelidad con la realidad. No hablo de gráficos, hablo de la experiencia de navegar, de sentir estar dentro de la embarcación y de la importancia que tiene tomarse esto como lo que es, una experiencia de simulación de Kayak y no un videojuego de Kayak. De cómo te tomes esto tendrás una experiencia u otra. 

El juego desarrollado por Better than life es una declaración de intenciones, primero en el aspecto gráfico y segundo en su cercanía a la realidad. Absolutamente todo el componente físico de remar está trasladado a la experiencia, por eso, mi primer consejo es que calentéis articulaciones (no, no estoy bromeando) y que tengáis claro que va a ser un trabajo físico con una intensidad media-alta. Tras mis primeros días terminé con severas agujetas en la zona del deltoides e incluso un principio de tendinitis en los codos. Claro está que el juego te permite del mismo modo tomártelo como una mera exhibición de músculo técnico donde disfrutar de los paisajes en las 4 zonas que tenemos. Aunque puede ser escaso el número de mapas, también es verdad que podemos alternar entre diferentes fases del día, y os aseguro que hay mucho cambio entre ver el mismo escenario de día o de noche. Estos escenarios son las siguientes:

• Papagayo (Costa Rica): navega por la costa tropical del mar Caribe de día o de noche.
• Cierva Cove (Antártico): rema entre bloques de hielo en la puesta de sol o contemplando las auroras boreales en plena noche.
• Bjørnøya (Noruega): se puede escoger navegar de día, de noche o en mitad de una oscura tormenta.
• Kings Kanyon (Australia): recorre un cañón a pleno sol o en el frescor de la noche.

El juego nos permite elegir entre 3 tipos de experiencias, el modo libre, el modo exploración y el modo carrera. Con el modo libre podremos soltar los mandos y quedarnos literalmente embobados disfrutando del paisaje mientras la piragua avanza a un paso realmente lento. Esta puede ser una buena opción para enseñarle el juego a personas sin experiencia previa en la realidad virtual o simplemente para mostrar las bondades de la realidad virtual.

El segundo modo nos permite explorar los escenarios remo en mano haciendo uso de los dos controladores de las PSVR2. Hay que tener una técnica correcta para avanzar y no desviarnos, así como para poder acelerar el ritmo. Aquí entran factores muy técnicos puros de un simulador donde será vital la manera en la que introducimos los remos en el agua o la profundidad a la que lo hacemos. En este modo podemos disfrutar de los paisajes a nuestro ritmo, y de verdad, es una auténtica locura disfrutar del sonido ambiente (recomiendo desactivar la música) mientras contemplamos las bondades de la naturaleza de cada escenario. 

Por último, tenemos el modo competición, un lugar totalmente competitivo donde competimos en carreras asíncronas contra los fantasmas de otros usuarios. Conseguir el bronce puede ser una tarea titánica, así que no os voy a contar si queréis el Oro, yo estoy buscando ya el teléfono de Saul Craviotto. Este es el modo más lesivo y para el que os vuelvo a aconsejar ir con pies de plomo si no queremos tener un contratiempo. El juego es exigente en ese sentido, cansa y en largas sesiones puede ser equivalente a una sesión de entrenamiento. 

Por lo general el juego no debería marear a menos que estés mínimamente entrenado y con piernas virtuales, pero he de reconocer que el mapa de Noruega bajo la tormenta me hizo tener que abandonar la sesión. Es tan real que parece que el kayak está agitándose bajo la tormenta. 

En el otro aspecto que destaca Kayak Vr es en el técnico, y es que Better than life ha conseguido que el juego se vea mejor en Psvr2 que en PCVR, lo cual parecía una quimera. Apoyándose sobre todo en el renderizado foveado y el seguimiento ocular, dependiendo de la zona en la que esté fijándose el usuario, se representará con una mayor nitidez y detalle. Esto, sumado a la pantalla Oled y al añadido del HDR, hace que nos vuele la tapa de los sesos el acabado gráfico. 

Las físicas son demenciales también, por poner un ejemplo, cuando te acercas a una roca, si empujas con el remo hacia ella las físicas del juego te harán salir despedido en consecuencia a la fuerza que ejerzas sobre la roca. Igualmente, puedes golpear objetos con los remos o agacharte para no golpearte en la cabeza con un tronco. El agua está increíblemente bien representada, estamos ante un juego puntero en ese aspecto.

En el aspecto negativo, he visto algo de popping exagerado en algunas zonas. 

Conforme vamos haciendo kilómetros, el juego nos recompensará con millas, que serán la moneda de cambio del juego para canjear por consumibles en forma de skins para los remos, el kayak o el sombrero que llevamos. Me ha parecido bastante desproporcionado, necesitando horas y horas de navegación para desbloquear los diferentes ítems. 

La duración del juego puede variar mucho dependiendo del usuario, aunque creo que solamente conocer cada uno de los 4 escenarios en todas sus variantes puede llevarnos entre 3 y 6 horas. Si le sumamos el aliciente de conseguir desbloqueables o de competir con otros usuarios (no en tiempo real) la cifra se puede disparar. Claro que puede haber usuarios que den una vuelta de 20 minutos por cada zona y crean que ya lo han visto todo, pero el juego, bajo mi opinión, no busca una exploración rápida sino un momento de paz y tranquilidad, tomándose la calma necesaria para descubrir cada recoveco de los escenarios.

Por un precio cercano a los 20 euros, creo que Kayak Vr es un juego que no debe faltar en la colección de nadie. Ahora y dentro de varios meses va a seguir siendo tan referente en lo visual, que no pasará desapercibido para ninguna visita en casa, aunque siempre siendo consciente de que es una experiencia muy real alejada de los videojuegos más arcades. Es más una experiencia que un juego, pero cuando nos introdujimos en la realidad virtual, unos de los alicientes era sentir cosas tan reales que nos hicieran dudar de que estamos ahí. Y Kayak Vr, nos permite dudar y sentir por momentos, que lo que estamos viviendo es completamente real.