Análisis de Marvel’s Spider-Man 2

No sé muy bien por dónde empezar. No quiero que este sea un análisis clónico de los que abundan en los medios. De hecho, podría empezarlo al revés y deciros ya la nota, es lo de menos. Un 10 para Spider-Man 2.

Carlos González

Le he puesto un 10. Obra maestra. Y es que este texto no va de desglosar cada apartado sumando variables aleatorias para al final obtener una puntuación y que el lector quede satisfecho. Esta es solo la humilde reflexión de Carlos tras haber completado al 100% la aventura de Marvel’s Spider-Man 2. La opinión de alguien que lleva muchos, muchos años jugando a videojuegos y que por difícil que parezca, todavía se sigue llevando las manos a la cabeza con determinadas obras. Ésta, exclusiva para el sistema Play Station 5 y disponible desde el 19 de Octubre de 2023, es una de ellas. Los escultores tras ella, Insomniac Games, la nueva Naughty Dog para algunos, la nueva Insomniac Games para mí. 

Porque tras muchas idas y venidas, Sony finalmente decidió en 2019 adquirir totalmente Insominac Games en una jugada maestra. Hay quien todavía cree que empezaron con Spider-Man 1 en 2018 sin saber que llevan haciendo juegos desde antes de que el 90% de vosotros hubiese nacido. Los Spyro the Dragon, los Ratchet & Clank, Resistance…y el que para mí fue el mejor juego de Xbox One la generación anterior: Sunset Overdrive. Esta gente es canela en rama, pero ¿sabéis qué? Que Insomniac Games no es la nueva Naughty Dog sino la otra Naughty Dog.

Han llegado a compartir trabajo y hasta sede (en el edificio de Universal Interactive Studios) sacando paralelamente juegos muy parecidos, véase Ratchet and Clank/ Jak and Daxter, Spyro the Dragon/Crash Bandicoot o Resistance/Uncharted, donde hasta los dos protagonistas principales se llamaban Nathan. 

Y cuesta creer lo que voy a decir, pero esta gente ya come en la maldita misma mesa que la bestia de Naughty Dog. Han ido creciendo, aprendiendo, corrigiendo y evolucionando hasta comprender exactamente lo que ha hecho grande toda la vida a la marca Play Station; crear juegos single player con calidad, inolvidables, divertidos y con recorrido para expandir la IP en el tiempo y convertir a los protagonistas en mascotas/caras visibles de la marca. 

Spider-Man 2 no tiene ningún sentido. La primera obra me pareció soberbia, pero con esta estaba muy reticente, a fin de cuentas, lo visto era una especie de más de lo mismo. Misma ciudad, mismo/mismos personajes, mismo universo…

¿Pero qué?

Pero no.

El aplastamiento contra la primera obra es de época y el mérito radica precisamente en que con tan poco margen de maniobra por lo expuesto unas líneas más arriba, se haya conseguido dejarla en evidencia. Spider-Man 2 no tiene ningún tipo de sentido, se han alcanzado unas cotas de calidad que erizan la piel cuando has visto dar los primeros coletazos de la industria y su evolución a lo largo de los años. A veces se dice de los juegos de aventura que son peli-juegos, pero Spider-Man 2 es literalmente lo contrario, un juego-peli, una obra fundada en el maravilloso y rico universo del cómic donde vamos a vivir una historia de la que somos parte activa de la misma y no meros espectadores. 

La vida son casualidades y una y otra concatenación de decisiones. Martin Goodman le dijo a Stan Lee hace más de 60 años que Spider-Man no era una opción para la compañía. El resto es historia. Y tras más de 20 mediocres videojuegos basados en el universo creado por Lee (alguno se salva) y cuando ya habíamos tirado la toalla por encontrarnos un juego que le hiciera honor, apareció un atisbo de esperanza en 2018. Hoy, Insomniac Games redondea lo que inició hace 5 años rematando y remachando cada clavo que hacía falta para elevar a obra antológica el universo de Spider-Man.

Las mecánicas jugables son parecidas, y si habéis visto videos podréis pensar que el sistema de desplazamiento es similar. La realidad es que movernos ahora por Nueva York es infinitamente más flexible, rápido e intuitivo a lo que hay que añadir la inclusión de las alarañas para desplazarse sobrevolando la ciudad. El balanceo, trepe y mecánicas de movimiento en el aire han sido pulidas para que moverse y llegar de un punto a otro sea mucho más satisfactorio, tanto, que apenas he utilizado el viaje rápido, el cual ahora es instantáneo, de manera literal; tardarás más en leer instantáneo que aparecer en la otra punta del mapa. La magia del SSD, que permitirá cargar la ciudad a una velocidad mucho mayor o alternar entre Peter y Miles en un segundo. 

El sistema de combate es parecido, realizar combos, esquivar, utilizar ataques avanzados…y una de las grandes incorporaciones, el Parry. Os pido por favor que iniciéis el juego un escalón por encima de la dificultad que viene por defecto, no solo para que no sea un paseo sino para que cobre sentido la mecánica de hacer uso de los Parrys para ganar concentración, recuperar vida y poder afrontar mejor determinadas situaciones que serán peliagudas. 

El Dual Sense implementa de manera sibilina todo su potencial, es posible que no seamos conscientes del silencioso trabajo que hace, pero está presente hasta en las cinemáticas. El sonido, las piezas musicales elegidas, la banda sonora ambiental y cada efecto sonoro son brillantes. Gráficamente es el techo actual en algunos apartados, no seguramente en los rostros y mecánicas faciales donde juegos como Horizon Forbidden West siguen por delante, pero en iluminación, distancia de dibujado, cinemáticas…sin palabras. El Ray Tracing es demencial. 

Las misiones secundarias, recados y coleccionables siguen estando presentes con una dinámica bastante parecida, si bien esta vez se ha refinado la fórmula para que haciendo la misma tarea, cada una tenga ligeras diferencias. Con algunas misiones secundarias me he llevado grandes sorpresas, y hay tareas básicas con más contenido emocional y de calidad que el que tienen misiones principales de otros videojuegos. 

Pero Carlos, ¿por qué un 10? ¿Por qué es tan bueno este juego?

Spider-Man 2 hace bien todo lo que toca, pero lo que más y mejor toca es su narrativa, la creación de unos personajes principales y secundarios profundos, cercanos y emotivos. Cada plano, cada secuencia, cada imagen que nos regala es maldito caviar, con un acabado técnico a un nivel inalcanzable para las demás desarrolladoras. Un juego oscuro, muy oscuro, desgarrador, moviéndose entre la realidad y la ciencia ficción constantemente, llevándonos en volandas por una montaña rusa de emociones donde tan pronto estaremos en la cima de una noria como combatiendo contra enemigos tenebrosos. Es divertido, es interesante, adictivo, emotivo, punzante, bonito, cercano. Spider-Man 2 es maravilloso, sencillamente un ejercicio de cómo veinte horas de pura calidad son mejores que cien de contenido vacío e irregularidades. Nos demuestra que más no es siempre mejor, pero que mejor es siempre más.

Lo que empezó siendo Pong ha terminado siendo Spider-Man 2, y se me ponen los ojos vidriosos al ver que esta gente reivindica el derecho a que se nos cuenten historias de la manera más grandilocuente posible, a que nos permitan soñar con esa fusión entre videojuego y cine, donde es posible vivir aventuras emocionantes con un mando en la mano, disfrutando y siendo testigos en primera persona del devenir de la trama.

Insomniac Games reivindica el Single Player, defiende lo que tanto valor añadido le ha dado históricamente a la industria y que sus contundentes datos les dan la razón ante los que han tirado la toalla con los triple A por sus altos costos de producción y poca rentabilidad. No hay juegos más o menos caros, no hay juegos más o menos exitosos, no hay juegos más o menos rentables. Lo que hay es trabajo, constancia, pasión en lo que haces. Dedicación y ardua responsabilidad de ser fiel al jugador, de no penalizarle, de darle lo que quiere y de ser consecuente.

Cuando se hacen bien las cosas puedes tocar el cielo, da igual si la obra ha costado 1 millón de euros o 150, hay muchos ejemplos de juegos Triple A rentables como de juegos Indies ruinosos porque esto, no solo va de dinero sino de qué se hace con él, del equipo humano y los recursos con los que cuenta cada compañía. Spider-Man 2 es esa tela de araña que nos permite seguir sin tocar suelo. Porque lo que nos ofrece es algo de una calidad descontrolada, es un derroche de hacer bien las cosas, de poner todo tu corazón en la obra que le estás dando al público. ¿Nunca habéis experimentado la sensación de recibir respeto indirectamente?

Como cuando esa heladera con los antebrazos acalambrados os coloca la bola de helado número setecientos del día encima de vuestro cucurucho con una sonrisa en la boca y te sonríe. Como cuando ese chico de la limpieza entra en tu habitación de hospital y limpia hasta la bombilla de la mesita de noche. Eso mismo he sentido durante cada misión del juego, que Insomniac Games me estaba demostrando un respeto enorme, delicadeza, amor por la obra, hilar muy fino para que la experiencia sea sublime. Han conseguido emocionarme, acostarme con un nudo en el estómago y el deseo de que amanezca nuevamente para continuar una historia que se mantiene en un punto álgido constante, para elevarlo cuando menos lo esperas con giros inesperados. En ese vaivén de emociones he disfrutado, me he frotado los ojos y he reflexionado nuevamente sobre lo importante que es que de vez en cuando, lleguen compañías a darle sentido y valor a la industria del videojuego. No queremos que mueran las grandes historias, no queremos que los casinos invadan nuestras experiencias ni que jugar conectado a otros jugadores sea una premisa. Queremos seguir viviendo y disfrutando experiencias a solas, en nuestro pequeño y humilde espacio destinado en nuestros hogares para este pequeño hobby que nos acompaña desde que éramos muy pequeños.

Escribirle a nuestros amigos y familiares lo vibrante que ha sido la experiencia del último videojuego, lo impregnado que hemos quedado con esa historia que nos han contado o lo bonita que es la vida cuando gracias a los videojuegos te acuestas con ganas de que llegue esa fecha marcada en el calendario en la que sale esa obra que anhelas desde hace tiempo. Gracias Insomiac Games por reivindicar nuevamente el derecho a seguir disfrutando de nuestro pequeño escondite de diversión que muchas otras personas nunca alcanzarán a comprender. Porque si amas los videojuegos tienes que amar Spider-Man 2, y no digo que sea el mejor juego del año o de la historia, tampoco digo que le tenga que gustar a todo el mundo, pero estoy convencido de que hoy el legado de los videojuegos es mucho más rico e importante por obras como esta que te dejan temblando y tiritando. Gracias por respetar al jugador. Gracias por darme un nuevo motivo por el que seguir creyendo en las grandes historias contadas por el que siempre he tenido claro, es el octavo arte. Y si no lo han reconocido aún como tal, hoy estamos un peldaño más cerca de conseguirlo.