Un Licántropo resplandenciente de RESIDENT EVIL™ VILLAGE aparece en Inglaterra
07/05/2021
El tráiler final de FINAL FANTASY VII REMAKE INTERGRADE llega con más combates intensos
07/05/2021

«A los jugadores les va a volar la maldita cabeza». Esta era la frase que Josef Fares dejaba en el teaser que se emitió durante el EA Play 2020 para presentar el juego que nos ocupa en este escrito y yo vengo para confirmar cada una de sus palabras. Me ha gustado revisar ese vídeo porque todas las sensaciones o emociones que comenta sobre It Takes Two las hemos vivido tal cual las dos personas que hemos jugado al título.

Una de las cosas que ha conseguido It Takes Two es replantearme el decirle a alguien «¡Eh ¡Vamos a darle caña a este juego!» y superar por fin esa pereza que me da el jugar online con los amigos, ya sea para partidas sueltas o para pasarnos un juego cooperativo. Solo me queda cumplir esa idea (me va a costar un poco estando cerrado solo en los single player), pero por ahora me voy a quedar con la maravillosa experiencia que he tenido jugando con mi hermana y el como llevamos a cabo este análisis.

Mi hermana Irene y yo nos llevamos 13 años. Yo recién cumplidos los 26 años y ella cumplirá 13 años en octubre. Sus amigos se sorprenden muchísimo de que nos hablemos o de que nos llevemos bien (ya ves tú), pero nuestra relación es buenísima y eso nos ha ayudado a mejorar la convivencia durante los últimos años. Unos años que se han visto marcados por el divorcio de nuestros padres, justo el tema que It Takes Two trata a su manera y que casualmente nos ha acompañado en el «primer juego» que hemos jugado de forma cooperativa.

Tras comentarle de que iba el título y ver que ella me daba el visto bueno, lo instalé en su PS4 gracias al maravilloso Pase de Amigo y estuvimos durante varios días dándole caña al nuevo juego de Hazelight hasta terminarlo. Os podemos adelantar que sí, que nos ha volado la maldita cabeza.

RELATIONSHIP!

El matrimonio compuesto por Cody y May se quiere divorciar debido a que las cosas no están bien y su hija Rose acude a un conjuro o solución que ha visto en el Libro del Amor del Dr. Hakim que podría servir para que sus padres vuelvan a ser felices. Por arte de magia, la pareja se convierte en unas figuras que la propia Rose ha creado -de arcilla y de madera- y el libro también cobra vida, siendo el propio doctor el encargado de dirigir esta terapia en la que el matrimonio tendrá el objetivo de recuperar una chispa amorosa por la que realmente no tienen ganas de colaborar.

Así es como comienza esta comedia romántica donde ese posible divorcio es simplemente una excusa para dar pie a una historia que es un auténtico desmadre, a la cual yo denomino como Toy Story meets Escenas de Matrimonio. Al ser unos juguetes, la pareja observa que su casa se ha convertido en un lugar gigantesco en el que todos los rincones ahora son sitios mágicos a la vez que peligrosos preparados por el Dr. Hakim como pruebas de reconciliación.

Durante su aventura se encontrarán con personajes parlantes tan curiosos como martillos, cajas de herramientas, peluches, ardillas, plantas, etc que les ayudarán a lo largo de su travesía o les pondrán las cosas muy complicadas en la búsqueda de su objetivo, mostrando en muchas ocasiones situaciones muy locas en las que tanto mi hermana como yo nos hemos reído mucho. Claro que también se deja espacio a esos momentos en los que la pareja se echa en cara el «antes eramos así y tal» durante el desarrollo de la trama y va dejando claro el final que nos vamos a encontrar, pero en ningún momento se toma muy en serio el tema del divorcio, no preocuparse.

En definitiva, es una historia que se disfruta muchísimo, es muy divertida y se complementa muy bien con todo lo que ofrece el juego. No puedo terminar esta parte sin una gran duda existencial: ¿por qué el Dr. Hakim habla como si fuese mexicano siendo su nombre de origen africano? Nosotros, a mitad del juego, decidimos llamarle Dr. Joaquín porque le pegaba más. Ahora, es el mejor personaje de It Takes Two y se dice que la captura de movimientos para el libro parlante la hizo el propio Fares. ¡Fantasía!

COLLABORATION!

Como he comentado en la introducción al artículo, hemos jugado a It Takes Two en dos consolas PS4 vía online gracias en parte al fantástico Pase de Amigo que se puede descargar desde las stores digitales, algo que poco a poco van introduciendo en más títulos fuera de EA y que me parece una idea fantástica.

Una vez la historia se situa en la metamorfosis de Cody y May, los jugadores ya pueden seleccionar al personaje con el que empezar la aventura, una selección que volverá a aparecer cada vez que se retoma la partida y la verdad que esto nos vino fenomenal para ir variando además de ir descubriendo lo que ofrecía cada protagonista.

No jugué A Way Out (mal), por lo que no sabía muy bien como enfocaba Hazelight el tema de la pantalla partida, pero me sorprendió muchísimo lo bien llevado que estaba en este título. Obviamente esto en una pantalla más grande lo hubiésemos disfrutado mejor, pero aún jugando en nuestros respectivos monitores (21 y 19 pulgadas) nos acostumbramos muy bien a los espacios verticales dedicados a cada componente de la pareja y tener la visión de ambos jugadores ayudaba muchísimo a posicionarse en el escenario para dar algunas indicaciones durante la aventura. La que más sufría era mi hermana debido a la escasa experiencia (por ahora) en videojuegos de este estilo, pero aún así no hubo ningún problema con dicha perspectiva.

Y ahora vamos al grano. ¿Cómo se podría definir It Takes Two? Pues Josef Fares lo etiquetaba como una aventura de acción y plataformas en aquel teaser que he mencionado antes y no le falta razón, pero me quedé con la sensación de que va más allá de eso.

Para poder colaborar en su búsqueda por esa «ansiada» reconciliación, Cody y May recibirán en cada capítulo unos poderes o mecánicas por parte del Dr. Hakim que nunca serán iguales pero que sí estarán relacionados para poder superar los obstáculos que vayan apareciendo y funcionan a la perfección. A nosotros nos gustaba empezar cada capítulo para saber qué poder nos iba a tocar en ese momento. Más de una vez hemos soltado un «Como mola lo que te ha tocado, ¿no?», envidia que se solucionaba cada vez que ocurría alguna desconexión inesperada de los servidores de EA y nos tocaba seleccionar de nuevo a los personajes.

Por mencionar dos ejemplos sin desvelaros todo lo que contiene el juego, en el primer capítulo la combinación son martillo-clavos y en el segundo es fusil francotirador-savia «inflamable», ofreciendo dos experiencias totalmente distintas. La fase de Bricomanía estaba enfocada más en las plataformas, utilizando los clavos como barras en las que May podía balancearse o como fijación de ciertas estructuras mientras que el martillo servía para activar mecanismos o destruir algunos espacios para que Cody pudiese avanzar. ¿El otro capítulo? Era una especie de Gears of War en el que uno iba empapando de savia «inflamable» a los enemigos y el otro los iba disparando para hacerlos explotar, aunque estas funciones también se utilizaban para algunos puzles muy bien pensados.

Y hablando de enemigos (que no es que haya muchos), It Takes Two tiene batallas contra Jefes Finales donde la colaboración y combinacion de esas mecánicas es mucho más importante para acabar con ellos. Buen trabajo el de Hazelight en esta parte porque no son fases sencillas y es de las pocas veces en las que se suele morir bastante (aunque la reaparición es muy rápida ya que consiste en aporrear un botón).

Además de los mencionados poderes, el juego tiene distintas fases intermedias en los que la chaladura o la creatividad de Josef Fares & cia no tiene límites a la hora de mostrar otro tipo de mecánicas. Nos podemos encontrar secciones de conducción (cabalgando un escarabajo, unas ranas o unas arañas), escenas de acción sobre un avion de miniatura, engancharte a lo Sekiro en unos raíles que recuerdan a Ratchet & Clank, un combate a lo Street Fighter y algún que otro homenaje a grandes videojuegos de la industria, ofreciendo así otras persepectivas o pequeñas experiencias que confirman esa sensación que tuve de que este título va más allá de ser simplemente una aventura de acción y plataformas.

A estas alturas del artículo os puedo confirmar que va a ser raro leer algo malo sobre It Takes Two, y es que otra cosa que hace fenomenal es incitar a los jugadores a explorar el escenario para descubrir y probar todas las posibilidades que ofrece, algo que en otros juegos me cuesta hacer por pereza y que aquí he disfrutado en todo momento.

Sin ser un juego de mundo abierto, tiene partes en algunos niveles (independientemente del tamaño) en los que a la mínima que se vea una cantidad de elementos de decoración con algún detalle extraño o que los personajes empiecen un diálogo que no tiene relación alguna con la trama es una indicación clarísima de que hay cosas que hacer y toquetear. Jugar con coches de juguete, sacar a un aldeano que está atrapado en un pegote de pegamento, hacerse fotos con una Polaroid gigante, pintar un cuadro… Hay un montón de situaciones tan buenas que te puedes tirar minutos o más de una hora con la necesidad de ver todo.

No son coleccionables (aunque activan algunos logros o trofeos), como ya confirmó el propio productor sueco-libanés, pero es que son mejores que cualquier tipo de coleccionable que se pueda encontrar en todos los videojuegos que existen, en mi opinión. No son brillos o iconos en el mapa que miras con pereza o aborreces, simplemente son multitud de opciones o secretos que se han colocado ahí por algo sin ninguna señalización y que el usuario ya sabe que eso se puede usar o da lugar a otro tipo de exploración.

Esto no acaba aquí, porque junto a estas curiosidades se suman los minijuegos, algo que It Takes Two sí indica con una pandereta que suena a medida que te acercas y donde la colaboración se va a tomar por saco. Un total de 25 actividades en las que se puede jugar al ajedrez, voleibol, carreras de caracoles, patinaje sobre hielo, Scalextric, etc y donde se activa la parte más competitiva entre ambos jugadores.

Con todas estas situaciones secundarias, la duración del juego se alarga más allá de lo que tiene fijado esta historia compuesta por 7 capítulos, que más o menos son unas 10 horas. Nosotros tardamos unas 14-15 horas porque disfrutamos de todo lo que ofrece, sin contar las veces que fallamos algún Jefe Final o alguna fase.

PASSION!

Esto es lo que se puede ver en todo momento a lo largo de esta experiencia. Hay mucha pasión en todo lo que compone It Takes Two, pero esta parte va dedicada a un apartado técnico donde también es fácil verlo. De nuevo, con la nueva generación ya presente y siendo este un juego que también se ha publicado tanto en Xbox Series como en PS5 (lo que ya dudo es si funciona vía retrocompatibilidad), se ve fenomenal en una PS4 normal.

La estética de los niveles me ha recordado muchísimo a Sackboy: Una aventura a lo grande, solo que aquí todo tiene un aspecto más realista y hay ratos en los que es difícil no pararse en un rincón para disfrutar de todo lo que está apareciendo en la pantalla. Todos los escenarios son preciosos, pero sin duda me quedo con un capítulo que es muy Toy Story ya que se desarrolla en la habitación de Rose. Hay muchos juguetes, un mar lleno de bolas de colores, mucha luz multicolor por algunos aparatos electrónicos, torres enormes de Jenga, tiene una iluminación cálida que da a entender que es horario de tarde… Me encantó, en serio. Algún problema de FPS y demás en algunas secciones, pero en general se ve de miedo.

El juego está doblado en inglés acompañado de subtítulos en español y las voces de los protagonistas (más allá de esa duda acerca del Dr. Hakim) son todo un acierto. La música que acompaña los niveles en todo momento es composición propia del estudio y donde de nuevo se puede ver alguna similitud con la película sobre juguetes de Disney.

Conclusión

Final del artículo y nada malo que decir de It Takes Two, sobre todo porque ni te fijas en ello y porque si lo estás disfrutando como un enano es porque todo funciona a la perfección. No es casualidad la buena crítica que ha recibido de nuevo un proyecto de Hazelight y no hay dudas de que tiene todas las papeletas de ser el Juego del Año de mucha gente porque es una auténtica maravilla. Si tenéis la misma suerte que he tenido yo de disfrutar de este juego con alguien, sea vuestra pareja o no, hacedlo. La nota es la que hemos decidido entre los dos hermanos, pero por mi parte lo recomiendo al 400%.

Gracias por estar tan mal de la cabeza, Josef Fares.

Santiago Sánchez
Santiago Sánchez
Gestor de contenidos y redactor en GamingUniverse. ¡Lo importante es disfrutar de los videojuegos!

Deja un comentario