Análisis de Horizon Forbidden West Complete Edition

En este análisis solamente se repasarán los aspectos técnicos de este port para PC de Horizon Forbidden West Complete Edition. Para leer nuestra opinión sobre el juego, os recomendamos echarle un vistazo al análisis que se realizó sobre la versión de PlayStation 5.

Es un momento muy interesante para el mundo de los videojuegos. Desde que Microsoft apostó al máximo por el PC con el estreno simultáneo de muchos de sus juegos en dicha plataforma y en su consola, Sony se ha ido animando poco a poco a hacer lo mismo, aunque con una mayor distancia de tiempo entre sus lanzamientos, dando algo más de exclusividad a sus juegos en PlayStation para que, un año después, se lancen en PC con mejoras gráficas y con ediciones completas con todo el contenido estrenado hasta el momento.

El caso que hoy nos ocupa es Horizon Forbidden West, secuela del primer juego con el que Sony se abrió la puerta a su nueva estrategia de lanzamientos en ordenador. No tuve oportunidad de jugar al primero en PC, ya que lo hice en PlayStation 4, pero tengo entendido que es uno de los mejores ports que ha habido en mucho tiempo, repleto de opciones y con un rendimiento excepcional. Su secuela, sin embargo, presenta un acabado algo regular que probablemente se hubiera solucionado con un poco más de pulido.

La nueva aventura de Aloy viene en un paquete que contiene el juego base junto con su DLC, Burning Shores. Todo esto dentro de un envoltorio que pone a disposición del jugador una gran cantidad de opciones gráficas y resoluciones. El título cuenta con todas las bondades de las que se puede disponer en PC: relaciones de aspecto adaptadas a monitores panorámicos, ningún límite para los frames por segundo, la posibilidad de personalizar con mucha profundidad todos los aspectos gráficos de la obra, o los más que conocidos DLSS, FSR y la opción de generar fotogramas mediante inteligencia artificial de la que dispone la serie 4000 de las tarjetas gráficas de NVIDIA.

Sin duda alguna, estamos delante de un port que tiene todo lo que cualquier jugador busca a la hora de personalizar su experiencia de juego y optimizar la obra a su gusto. Eso sí, vale la pena destacar que esta secuela no cuenta con ningún tipo de soporte para ray tracing, algo que, siendo honesto, tampoco se echa demasiado en falta, y podría haber hecho que la factura y el rendimiento del título empeorasen.

Hablando de la experiencia que he tenido con el juego, he de decir que ha sido algo agridulce. Si bien el título no funciona tan mal como la última entrega de Ratchet & Clank, lo cierto es que las especificaciones recomendadas no se ajustan a la realidad de lo que realmente piden. Cumpliendo aquellas que me permitirían, sin problemas, mover el juego al máximo a 1080p o 1440p a 60 frames, o a 30fps si quiero subirlo a 4K, me he encontrado con que ha sido prácticamente imposible conseguir un rendimiento suave y constante a 60 fotogramas por segundo, fuera la resolución que fuera (incluso poniéndolo a 720p).

De hecho, el título presenta un comportamiento muy extraño, y es que a 1080p funciona peor que a 1440p. Por un momento pensé que quizás habría algún cuello de botella en mi ordenador, pero tras varias pruebas he comprobado que es el único juego con el que he tenido este problema.

He probado todo tipo de configuraciones, y ninguna de ellas me ha terminado de convencer. Tras unas horas revisando, conseguí encontrar una optimización que me permitía que el juego fuera “jugable”, pero a expensas de un rendimiento que sufre de un stuttering constante y que resulta en una experiencia muy poco satisfactoria.

Me gustaría ahondar en ese stuttering, y es que la obra no es capaz de mantener una tasa de frames constante, y da saltos entre los 40 y los 60 de forma habitual. Quizás uno se puede acostumbrar mientras juega, pero el verdadero problema se encuentra en el paso a las cinemáticas, que rara vez funcionan por encima de los 25 frames, y que por lo general van a menos de 20. Nuevamente, tras probar todas las configuraciones, no he sido capaz de dar con la solución.

También me he encontrado con muchísimos fallos gráficos. Las cargas de texturas, en algunas ocasiones, se demora un poco, pero el detalle que más me ha llamado la atención es que los modelados de todos los personajes presentan una desconexión entre el torso y el cuello, omitiendo la unión de ambas piezas en los cuerpos de los compañeros que nos encontremos a lo largo de la aventura. Esto es algo que notaremos, sobre todo, si los protagonistas no llevan ningún tipo de armadura y tienen el cuello al descubierto. No es algo que afecte al rendimiento, pero llama la atención visualmente.

Más allá de eso, el juego presenta los típicos glitches de animaciones faciales que se rompen y se repiten de forma constante, cuerpos sin cabeza cuyo rostro esta unos centímetros más adelante de forma flotante, o acciones que no se realizan de la manera adecuada cuando presionas un botón. No son problemas que impidan jugar a la aventura, pero chocan un poco.

En líneas generales tengo una gran cantidad de sensaciones encontradas con este port. Sinceramente, me hubiera gustado disfrutarlo más. Ahora mismo creo que necesita un poco más de pulido para que sus requisitos técnicos sean realistas, o para que la optimización sea la adecuada. Es una verdadera pena contar con un equipo que puede moverlo sin problemas, pero que el juego tenga limitaciones o problemas que impidan que la experiencia sea suave y divertida.

Aun así, es una mejora sustancial respecto al último port de un juego de PlayStation, pero aún está muchos pasos por detrás de poder ofrecer un rendimiento correcto.

Este análisis ha sido realizado en base a la versión de Steam.