Análisis de Shadows of Doubt

Creo que es evidente que Shadows of Doubt se ha convertido en uno de los fenómenos más interesantes del medio en los últimos años. Su propuesta mezcla L.A. Noire con Blade Runner y Deus Ex, dando como resultado un juego muy interesante y ambicioso.

Tras un tiempo en Early Access por fin se ha estrenado en su versión 1.0, y hemos tenido la oportunidad de probarla para comentar qué nos ha parecido.

En la aventura tomamos el rol de un detective que deberá ir resolviendo diferentes casos para dar con los culpables. Estos sucesos pueden ser asesinatos o robos, pero también podremos sacar fotos a sospechosos o ayudarlos en sus escaramuzas escondiendo los cuerpos.

Lo interesante del título no es eso, sino cómo juega con la información. Shadows of Doubt te permite buscar todas las pistas por tu cuenta y ordenarlas a medida que las descubres. Tras este proceso de investigación, darás con el culpable que más te encaje en el caso y podrás meterlo entre rejas.

Realmente el título no tiene un argumento como tal. Hay algunas misiones y momentos predefinidos, pero toda la aventura goza de ser una experiencia procedimental: cada caso se genera para nosotros en el momento, al igual que la ciudad en la que ocurren y los habitantes que viven en ella.

De hecho, el propio juego nos ofrece la posibilidad de jugar con la urbe predeterminada pero procedimental (y de varios tamaños diferentes), o crear una más personalizada en función de la cantidad de población que nos interese. Se trata de una opción similar a la que ofrece Project Zomboid a la hora de crear sus mundos aleatorios, solo que en el caso de la aventura de detectives quizás es algo más limitado.

Shadows of Doubt es más una experiencia jugable que argumental. Cada caso es único: podremos encontrar diferentes propuestas en un tablón y elegir la que más nos convenga para obtener información. A partir de ese momento nos encontraremos con un cadáver, y tendremos que buscar la mayor cantidad de pistas posibles, como su nombre, correspondencia, huellas dactilares…

A medida que obtengamos esta información podremos ir preparando nuestro propio tablón de pruebas para buscar las conexiones que más nos llamen la atención. Quizás esa persona estaba vinculada a un restaurante de la ciudad, o puede que hubiera intercambiado un correo electrónico sospechoso con otro ciudadano. Por medio de estas pistas podremos, por ejemplo, dar con dicha persona y su dirección por medio de la guía telefónica, o ir a un establecimiento y preguntar por la víctima.

Realmente esta es la fórmula para todos los casos, y es muy llamativa y original, de ahí mi comparación con L.A. Noire, ya que hace lo mismo, pero multiplicado por mil. El problema es que, quizás, se pasa de realista y misterioso.

El problema de Shadows of Doubt es seguir de una forma demasiado fiel la moda de no llevar de la mano al jugador. Aunque en el primer caso “te ayuda” un poco más, a partir del resto apenas ofrece pistas que permitan comenzar a explorar, dando detalles muy escuetos de los sujetos a los que buscamos.

Esto genera una frustración enorme, ya que puedes estar muchísimas horas dando vueltas hasta dar con algo que te permita avanzar en el caso. Lo peor es que esto tampoco mejora a medida que obtenemos más información, ya que esta tampoco es del todo clara, y los objetivos que se fijan en la pantalla a veces están mal indicados y no son muy precisos, lo que dificulta poder resolver los crímenes.

Da la sensación de que el título tiene una amalgama de ideas realmente interesantes, pero que su desarrollo y conexión aún no está del todo pulido, además de carecer de muchas opciones de calidad de vida que mejorarían su ritmo. Entiendo la emoción de descubrir todo por tu cuenta, pero cuando la información es nula y generas frustración, algo falla. Lo curioso es que aunque se cambie la dificultad el resultado es el mismo, por lo que se trata de una opción que parece no tener ningún efecto en el juego, al menos de momento.

En líneas generales, parece que Shadows of Doubt necesita más tiempo de desarrollo para poder pulir su premisa y ofrecer una mayor personalización de las partidas para que los jugadores se encuentren más cómodos en base a cómo les guste jugar. Un ejemplo perfecto de esto es Project Zomboid y su amplio editor de partidas, que te permite ajustar todos los parámetros e instalar infinidad de mods para ajustar el título a tu gusto. Esta aventura detectivesca se beneficiaría muchísimo de un planteamiento similar, y no descarto que sea algo que se perfeccione con el tiempo.

Matizar, también, que el combate cuerpo a cuerpo ahora mismo es muy pobre. Entiendo que no es su mecánica principal, pero no comprendo la posibilidad de poder comprar armas y que el juego no te deje usarlas (salvo que sean armas blancas). Sí me parece interesante cómo coquetea con el inmersive sim al más puro estilo Deus Ex, pudiendo mejorar a nuestro personaje y desbloquear habilidades que hagan nuestro trabajo más sencillo.

Puedo decir algo similar de la personalización de “nuestra vida” en el juego, ya que podremos comprar diferentes pisos en los que alojarnos y tener guardado nuestro equipo, puesto que el inventario también es limitado.

Como digo, veo que el título es un conjunto realmente interesante y único de ideas, pero a todas ellas les falta mucho trabajo para integrarse y funcionar como es debido.

Gráficamente sí que me ha parecido interesante, ya que apuesta por un estilo visual cúbico que le da mucha personalidad y que se ve favorecido por una iluminación que recuerda enormemente a la película de los replicantes de Ridley Scott. Además, el rendimiento del juego es muy bueno, sobre todo si tenemos en cuenta la cantidad de cosas que genera de forma procedural de manera constante. Más allá de algún tirón puntual, todo funciona correctamente.

Otro punto llamativo es la banda sonora, que opta por un enfoque más ambiental para generar tensión en función de la situación en la que nos encontremos. Por ejemplo, se apostará por melodías más tranquilas mientras exploramos, y por otras más intensas pero poco intrusivas cuando estemos allanando una propiedad ajena o nos estén persiguiendo. Evita por completo melodías más típicas del género de la acción, y lo hace con mucho acierto.

Lo bueno de Shadows of Doubt es, sin duda alguna, su duración infinita, ya que el juego puede durar lo que nosotros queramos. Creo que se trata de una aventura que depende en gran medida de su fórmula jugable, y para que esta sea disfrutable debe mejorar considerablemente. Hablamos de un título al que juegas para sentirte un detective, y ese feeling lo tiene más que conseguido, solo le queda afinar sus mecánicas para poder ofrecer una inmensa cantidad de horas de diversión en cualquiera de los mundos procedimentales que vayas a crear. El tiempo dirá si estas mejoras dan lugar a la joya que puede terminar siendo.

Este análisis ha sido realizado en base a la versión de Steam.