Análisis Inner Ashes

Hace unos cuantos días tuve la oportunidad de cubrir la presentación del videojuego que hoy nos ocupa y de conocer un poquito más a sus creadores a través de una entrevista. Ellos son Calathea Game Studio e Inner Ashes es su primer videojuego. Un proyecto que ha pasado por pequeñas complicaciones debido a la pandemia, pero que siempre se ha mantenido fuerte gracias a su propuesta: hablar sobre el Alzheimer. Una enfermedad que les ha tocado de cerca, pues algunos familiares y personas cercanas al equipo han tenido que convivir con las secuelas del Alzheimer y su correspondiente tratamiento. Esto fue el motivo clave para el nacimiento de un proyecto a cargo de unos estudiantes que recién habían terminado sus postgrados sobre desarrollo de videojuegos.

Eran conscientes de que Inner Ashes era una apuesta arriesgada y muy alejada de lo comercial, pues con el tema tan delicado que toca es difícil convencer a gran parte de los jugadores. Aún así, inspirados en títulos como «That Dragon, Cancer» o Last Day of June, sabían que podían concienciar al público sobre una enfermedad como el Alzheimer a través de una jugabilidad basada en la narrativa, en la exploración y en la resolución de puzles.

Tras ganar el Premio Especial Compromiso PlayStation, han conseguido desarrollar el videojuego bajo el paraguas de PlayStation Talents y que se publique en todas las plataformas gracias al trabajo del publisher español Selecta Play, estando disponible desde el pasado 30 de junio. Nosotros ya lo hemos podido jugar y os podemos asegurar que Inner Ashes va más allá de ser el primer videojuego de un estudio, pues es un gran trabajo divulgativo sobre un tema que no todos conocemos.

Inner Ashes cuenta la historia de Henry Hughes, un guarda forestal al que se le ha detectado Alzheimer precoz y, en consecuencia, va perdiendo todos sus recuerdos. Incluidos todos los momentos que ha vivido con su hija Enid. Ella, que no está junto a su padre tras conocer la noticia, le manda un libro de ilustraciones junto a una carta en la que desea que este regalo le pueda ayudar a recuperar sus recuerdos más importantes. Una trama que, junto a otros elementos que iremos comentando, forma parte de un gran equilibrio emocional que consigue suavizar la delicadeza del tema central del juego.

Para poder plasmar lo que realmente experimenta una persona con Alzheimer, Calathea Game Studio ha trabajado codo con codo junto a Maria Luisa Delgado (Doctora en Psicología, especialista en enfermedades neurodegenerativas y componente de la Unidad de Investigación sobre el Alzheimer en la Universidad Complutense de Madrid), la cual ha aportado mucho feedback en las mecánicas principales del videojuego, siendo una de ellas la perspectiva que tienen las personas con Alzheimer del mundo que les rodea. Y es que estas personas suelen vivir en dos mundos diferentes: uno real en el que aún son conscientes de sus actos y otro imaginario causado por los efectos de la enfermedad.

Esta será la base principal de todos los capítulos de Inner Ashes. Siempre empiezan en la planta baja de la casa de Henry Hughes, la cual está llena de unos post-it (una de las herramientas claves durante el tratamiento del Alzheimer) que ayudan al protagonista a recordar sus tareas cotidianas a la vez que nos sirve para ir obteniendo información tanto de la enfermedad como de la vida del protagonista. Incluso podemos interactuar con ciertos elementos de la casa, siendo el libro de ilustraciones de Enid uno de ellos y el que nos teletransportará a ese mundo imaginario que Henry tiene en su cabeza: un lugar algo confuso, con paisajes preciosos y con los recuerdos desperdigados por cualquier rincón.

Estos niveles se enfocan mucho en la exploración, pues a medida que Henry avanza a lo largo de estos escenarios mentales nos vamos encontrando con cosas que el protagonista puede recoger. Desde coleccionables que amplían la historia que rodea a la familia Hughes hasta las piezas clave para resolver los rompecabezas de cada una de las fases. Y es que los puzles son otra de las herramientas vitales para que el paciente con Alzheimer pueda retrasar la evolución de la enfermedad, convirtiéndose así en otra de las mecánicas principales de Inner Ashes y que harán acto de presencia de formas diferentes. Para poder recuperar los momentos que ha vivido junto a Enid, Henry siempre va a tener que recoger uno o varios objetos, los cuales harán que resuenen voces en su cabeza recordando los momentos o el significado de las cosas que acaba de recoger. Estos elementos, una vez guardados, se convertirán en unos post-it que Henry podrá revisar o seleccionar para cumplir su objetivo y llegar hasta los recuerdos de su hija.

El problema es que Henry no siempre encontrará la solución en estos escenarios mentales. En ciertas fases, encontraremos su sofá en algún rincón del escenario, el cual permitirá al protagonista despertarse en el mundo real y explorar de nuevo su casa. Como he comentado en líneas anteriores, también podemos interactuar con varios objetos del hogar, los cuales tendrán la misma función que las cosas recogidas en los mundos imaginarios y que permitirán a Henry continuar con su aventura. Con ellos podremos desbloquear caminos, completar mosaicos, activar mecanismos o recomponer la partitura de una de las canciones favoritas de la familia. Una vez Henry llega al final de los niveles, se abre una puerta hacia el recuerdo relacionado con su hija, el cual conseguirá completando otro de los rompecabezas principales de Inner Ashes.

El Tetris o los puzles basados en el famoso videojuego también son considerados como una de las actividades clave tanto para detectar la enfermedad como para tratar el propio Alzheimer, ya que este juego beneficia al correcto desarrollo cerebral. Al llegar al lugar que almacena el correspondiente recuerdo, Henry tendrá que superar un puzle con piezas de Tetris para poder desbloquearlo del todo. Unas pruebas que no siempre son sencillas, pues combinar cada una de las piezas para que se adapten a la forma que exige el puzle puede ser una tarea de varios minutos, pero no llegan a ser rompecabezas complejos que rompan el ritmo de la aventura. Si tenemos que ponerle una pega a esta parte, es lo difícil que cuesta desencajar las piezas para empezar el puzle de nuevo, ya que no se distingue muy bien la pieza que estamos seleccionando en ese momento. Aún así, sin inventar la rueda, todos los puzles que componen la experiencia de Inner Ashes terminan encajando muy bien en su jugabilidad, ya que se adaptan correctamente al tamaño de sus escenarios y al ritmo de la exploración. Una vez superados, Henry recordará cada uno de los momentos que ha vivido con Enid y estos se plasmarán en el libro de ilustraciones que le ha regalado su hija.

Una hija a la que siempre le ha encantado pintar, algo que veremos de forma constante en los dibujos de los coleccionables que se pueden recoger en cada uno de los diferentes niveles del juego y que siempre sacarán una sonrisa de oreja a oreja. Si algo me ha gustado de los coleccionables del videojuego son los folletos informativos sobre el Alzheimer, motivo por el que destaco Inner Ashes como un gran trabajo divulgativo más allá de la hermosa historia que nos cuenta. Aquí los jugadores van a aprender cosas sobre las fases previas de la enfermedad, el significado de algunas secuelas o cómo se debe tratar al paciente en casa para tener todo controlado. Conocimientos que siempre podrán ampliar contactando con profesionales en caso de tener alguna experiencia cercana.

Estos documentos pondrán sensible a más de una persona, pero los momentos alegres de la historia y el precioso apartado artístico de Inner Ashes consiguen suavizar la delicadeza del tema durante toda la aventura. Y es que los escenarios mentales de Henry Hughes suelen acomodar muchísimo al jugador a la hora de contar esta historia sobre el Alzheimer, mostrando unos maravillosos paisajes acompañados de colores vivos y de una ligera banda sonora que consiguen que el jugador no piense mucho en lo malo de la situación mientras ayuda al protagonista a recuperar sus recuerdos. Unos recuerdos que tienen voces en español gracias al trabajo de doblaje realizado por Kiko Béjar (Henry Hughes), Andrea Alzuri (Enid) y Óscar Ferrer (Joseph), los cuales consiguen meternos dentro de la historia con sus actuaciones. Destacar sobre todo la del locutor Kiko Béjar, siendo este su primer trabajo como actor de doblaje y consiguiendo de forma más que notable transmitir las sensaciones de Henry Hughes durante esta lucha por conseguir recordar todo los maravillosos momentos que ha vivido durante el crecimiento de su hija.

La historia de Henry y Enid Hughes, con todos sus coleccionables recogidos, puede durar unas 3 horas y algo, duración más que acertada viendo todo lo que ofrece y lo que cuenta. Como siempre, esto depende de cada jugador y de cómo resuelva los diferentes rompecabezas de la aventura. Nos hubiese gustado que el juego tuviese selección de capítulos una vez terminada la aventura, pudiendo recoger aquellos coleccionables que nos hayamos dejado por el camino y así completar uno de los sencillos Platino que se pueden conseguir en PlayStation.

Conclusión

Queremos volver a destacar en esta conclusión que el primer videojuego de Calathea Game Studio es un gran trabajo divulgativo, cosa que no quita que Inner Ashes sea un producto redondo al que pocas pegas se le pueden sacar. Confiaron en sus experiencias personales para hablar sobre el Alzheimer y con ello han conseguido una pequeña joya nacional que ojalá tenga la suficiente repercusión para que el público general pueda saber mucho más sobre esta enfermedad, y que las correspondientes asociaciones valoren el proyecto y lo compartan con las familias afectadas. Este es un videojuego que tenemos que evitar que se olvide en el tiempo.

Este análisis ha sido posible gracias al código de la versión PS5 que nos facilitó Calathea Game Studio en su Presskit